Ya todo es inútil por lo visto.
No me voy a gastar más en vos, me estás consumiendo día a día.
Cómo negar que te amo, aunque suene tan cliché ya no sé que mas hacer...

Las cornisas me guiñan amigablemente, el cielo se ennegrece con tu mirar. No te gastaste en preguntarme como estaba, si algo me pasaba. Ahora es fácil llorar con un ser menos, ya me podes echar la culpa libremente, y sin culpa.

Solo te robaré un poco más de tiempo con ese papelerío de defunción, algún que otro peso para el resto, y así por fin te habrás quitado este peso de encima. ¿O tampoco lo harías por mí?

Un último cigarrillo acompaña mi recuerdo en tu mente y así como se termina la nicotina se termina el amor. Solo tienes que cerrar el cajón, ¿o tampoco lo harías por mí?